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Según la Association of University Technology Managers (AUTM), la transferencia de tecnología se define como el proceso de transferir de una organización a otra los descubrimientos científicos, con el fin de promover el desarrollo y la comercialización. Esta transferencia se lleva a cabo por lo general a través de la firma de acuerdos (o contratos) de concesión de licencias entre las universidades, gobiernos, empresas privadas o entidades comerciales de capital público.
El objetivo principal es Impulsar el desarrollo y crecimiento de los diversos sectores de la sociedad mediante el acceso al conocimiento y experiencia de los grupos de investigación, innovación y desarrollo o evolución tecnológica. Los proyectos de transferencia tecnológica impulsan la competencia y los beneficios económicos entre las instituciones educativas, las organizaciones gubernamentales y las empresas.
La transferencia de tecnología es un proceso complejo, que requiere de definiciones claras entre todas las partes involucradas; las herramientas más usadas para dicho propósito son los acuerdos o convenios de cesión de derechos o las licencias, con los cuales la organización generadora otorga sus derechos de uso de la tecnología a un tercero. La principal diferencia entre las dos anteriores es que la cesión de derechos transfiere totalmente la titularidad de la tecnología y todos sus derechos correspondientes, la segunda sólo limita al uso y comercialización de dicha tecnología, en un periodo de tiempo determinado y una zona geográfica delimitada, además de contar con cláusulas específicas de utilización, pero el licenciante nunca pierde los derechos ni la titularidad del desarrollo tecnológico.
Partiendo de que la transferencia de tecnología en sí, es un proceso complejo, así mismo es el tiempo de desarrollo, hay que encontrar desde la mejor manera de protección de la propiedad intelectual hasta las personas o empresas indicadas para su transferencia, esto puede llegar a tardar años en desarrollarse, inclusive puede que la estrategia desarrollada para la transferencia no sea la adecuada y no encontremos interés inmediato por parte de las empresas que pensábamos pudieran ser posibles destinatarios de la tecnología. El tiempo necesario depende regularmente del nivel de innovación en el producto, las condiciones del mercado, la competencia y además la capacidad y voluntad de los titulares e inventores de dicho desarrollo tecnológico.
No existe un proceso como tal definido para el proceso de transferencia, cada tipo de desarrollo o nivel de innovación, tiene así mismo su complicación y diferencias durante el proceso, pero regularmente se identifican las siguientes etapas: Investigación y desarrollo, Evaluación, Protección de la Propiedad intelectual, Mercadeo, Licenciamiento o cesión, y como punto final la Comercialización y pago de regalías.